¡Prepárate para recibir el Espíritu de Dios!

Ha pasado ya la semana más importante para todos los cristianos, los altares han dejado elcolor morado y se han vestido de gala para vivir los misterios de la pasión, muerte y, muy especialmente, la Gloriosa Resurrección de Cristo. Es un tiempo diferente, un tiempo de alegría y gozo, un tiempo donde todo nos recuerda que estamos hechos para la eternidad.
      

Sin embargo, la vida cotidiana sigue, con sus alegrias y sus sinsabores. Y nosotros, laIglesia que milita en la tierra, con la esperanza de alcanzar el cielo un día, a veces nos olvidamos que en este peregrinar no vamos solos.
      

Regresemos por un momento a los hechos, Jesús muerto y de pronto, resucitado y al ladode sus amigos. Que alegría tan grande, ¿imaginas el gozo de disfrutar esos días al lado del Rey del universo, el mismo que ya ha vencido a la muerte? Y de pronto... anuncia que debe irse.
      

Y no solo eso, sino que afirma que eso les conviene, y me atrevería a decir, nos dice que“nos” conviene...para que venga el consolador, el Espíritu de Verdad, el Espíritu de la promesa, el Espíritu de Gloria: su propio Espíritu. ¡Qué impactante!
      

En un mundo donde anhelamos tan incesantemente consuelo, guía y fortaleza, viene Diosmismo a habitar nuestros corazones para caminar a nuestro lago en el camino hasta Él.
Dicho de otro modo, Jesús sabe que esta vida es difícil, y el más que nadie lo puede decir,
pero al mismo tiempo nos quiere santos, a ti y a mi. Y es por ello que nos dice que nos
conviene, que conviene que Dios mismo permanezca con nosotros, que inhabite nuestros
corazones y nos llene con sus dones, para tener esa fuerza de lo alto que nos lleve a vivir
una vida en el Amor.
      

¿Y cómo nos preparamos para recibirlo? En estas semanas en las que disfrutamos laalegría de la Pascua, no nos olvidemos de que estamos en espera de que el mismo
Resucitado nos envíe Su espíritu. Y para ello, te animo a vivir estos 5 pasos:
                

1. Pasa tiempo con Dios. Dale una cita en tu calendario, sal a caminar a su lado,visítalo en el sagrario, escríbele desde tu corazón. Conecta con el Amigo que más te
   ama en todo el universo.
                 
2. Regresa a los sacramentos. Recibe a Jesús Eucaristía, para que desde dentrotransforme tu corazón en una digna morada del Espíritu Santo. No te olvides acudir
   a la confesión frecuentemente y mantenerte en gracia,
                 
3. Entrégate a los demás. El Amor de Dios, es un amor de entrega. Busca a tualrededor alguien a quien ayudar con sus cargas o aligerar su camino
                 
4. Perdona. Vacía tu corazón de todo aquello que lo llena de dolor y permítele a Dios,llenar con su fuego de amor cada vacío.
                 
5. Y por último, preparemos nuestros corazones. Abre la puerta a una fe expectanteque sea consciente de que para Dios no hay fronteras. ¿Tienes defectos?
   Preséntaselos a Dios, el los sabrá transformar. ¿Necesitas consuelo? Abre tus
   brazos y déjate abrazar por Él. ¿No sabes que necesitas? Él sí lo sabe, confía.
                      

Que la fiesta de Pentecostés no te agarre desprevenido. Prepárate para recibir en tucorazón al único que puede llenar tu corazón y tu vida con un fuego que nunca se apaga.
¡Dios te bendiga!